Opacificantes

Los opacificantes son un grupo de óxidos de distintos elementos que se utilizan en los vidriados para conseguir color blanco.

La opacidad óptica se produce cuando no vemos lo que hay debajo del vidriado, pero los llamados opacificantes solo se refieren a la opacidad provocada por el color blanco y además deben mantener la cualidad brillo o mate del vidriado, es decir consiguen opacidad blanca sin modificar la superficie del vidriado.

Por ejemplo, un vidriado rico en óxido de calcio (CaO) produce vidriados blancos que siempre son mate, por lo que no se le considera opacificante.

Los óxidos opacificantes son partículas coloidales opacas con un alto índice de refracción, por lo que provocan una gran dispersión y esparcimiento de la luz. Algunos opacificantes tienen temperaturas de fusión altas, de forma que se mantienen con su estructura cristalina durante la cocción, otros se funden durante la cocción pero forman cristales por desvitrificación durante el enfriamiento.

El vidriado con opacificantes tiene una matriz vítrea transparente en la que los opacificantes quedan flotando en forma de pequeños cristales de forma dispersa de manera que, debido a su pequeño tamaño, si alguna partícula llega a la superficie del vidriado apenas afecta al brillo. Por otro lado, los opacificantes no absorben ninguna frecuencia de luz visible, por lo que toda la luz incidente se refleja y se dispersa produciendo el color blanco del vidriado. 

Los opacificantes blancos y sus respectivos índices de refracción (n) son los siguientes: 

• Óxido de Estaño SnO2 (n=2,04)
• Óxido de Zirconio ZrO2  (n=2,40) y Silicato de Zirconio ZrSiO4  (n=1,94)
• Óxido de Titanio TiO2 en forma de Anatasa  (n=2,52) y de Rutilo  (n=2,70)
• Óxido de Zinc ZnO  (n=2,015)
• Óxido de Cerio CeO2  (n=2,33)
• Óxido de Antimonio Sb2O3  (n=2,60)

El opacificante más eficiente es el SnO2 que da un blanco muy puro y no afecta al brillo del esmalte. Su único inconveniente es que no puede utilizarse en cocciones reductoras ya que se reduce a SnO y deja de ser blanco. 

El zirconio es muy similar al SnO2 aunque produce un blanco más frío. El silicato de zirconio necesita más cantidad que el óxido de zirconio para conseguir blancos (tiene menor índice de refracción) pero ambos se utilizan como materias primas.

Menos utilizado es el antimonio porque se disuelve en algunos vidriados y da colores amarillos con plomo.

Los opacificantes de estaño y zirconio respetan la cualidad de brillo/mate del vidriado. Es decir, si el vidriado era brillante, lo seguirá siendo con la adición del opacificante, y si era mate también seguirá siendo mate.

El óxido de titanio y el óxido de zinc respetan el brillo del esmalte cuando se añaden en cantidades pequeñas, pero según aumenta su concentración comienzan a producir superficies más mates. El titanio da blancos con tonalidades amarillas y el zinc tiende a formar nubes blanquecinas.

El óxido de cerio se utiliza a nivel industrial y no suele encontrarse disponible para artesanía.

Fuera de la opacidad blanca, también producen opacidad los alcalinotérreos, la alúmina y los óxidos colorantes en saturación,  pero producen superficies mates y/o coloreadas, por lo que no se les considera “opacificantes».